Escrito por Mercadeo ARUS
La usabilidad, funcionalidad y desempeño de tus aplicaciones son factores importantes que tienen un impacto directo en la imagen y en la economía de tu organización, hablaremos de cómo gestionar estos aspectos desde el desempeño de las aplicaciones.
El mercado de servicios está lleno de muchas tendencias, el Internet de las cosas (IoT), la nube, redes sociales y otras que han impactado la forma de hacer negocios y la interacción con los usuarios finales. Gestión de Las aplicaciones
Sin embargo, existe otra tendencia que corresponde a un común denominador de mayor importancia: las aplicaciones y la experiencia que éstas entregan.
¡Bienvenido a la economía de las aplicaciones!
La usabilidad, funcionalidad y desempeño de sus aplicaciones tienen un impacto directo en la imagen y en la economía de su organización. Éstas tienen un efecto poderoso de interactuar de manera digital con sus clientes, por lo que la experiencia con las aplicaciones traduce la satisfacción con la marca y con su servicio.
Una mala experiencia resulta de retrasos en la respuesta a las solicitudes de los clientes, tiempos de inactividad, crashes y tiempos de no disponibilidad de sus servicios.
Por lo tanto, los departamentos de TI de su organización requieren evolucionar sus estrategias de monitoreo y administración centradas en la captura de métricas que reportan de manera descriptiva la existencia de problemas de desempeño, a un enfoque en las transacciones del usuario final que les permita tener visibilidad punto a punto del comportamiento de sus aplicaciones, al tiempo que reporte proactivamente información oportuna que facilite determinar las acciones a ejecutar para evitar futuras degradaciones e interrupciones de sus servicios.
De esta manera, su equipo puede ser capaz de detectar y resolver las demoras, inactividades y crashes que se generan en su aplicaciones y que impactan la experiencia de sus usuarios.
Adoptar una cultura de mejora continua de sus servicios, evoluciona los objetivos de TI de gestionar la infraestructura de sus aplicaciones a gestionar la experiencia de sus usuarios, lo que a su vez ayudará a su organización con la fidelización de sus clientes, la ganancia de nuevos usuarios y el incremento del valor de su negocio.
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